Cuando visitamos alguna ferretería o negocio especializado en la venta de tornillos, con motivo de adquirirlos para realizar determinado trabajo, seguramente nos hemos encontrado con que los encontramos en distintas medidas, tipos y materiales.
Es importante saber que el tipo de tornillo que debamos comprar, debe corresponder al tipo de material donde lo vamos a emplear para labores de fijación y/o unión.
Tal es el caso de los tornillos de acero inoxidable, los cuales están fabricados principalmente para usarlos en materiales de la misma aleación, compuesta por níquel y cromo. Pero a veces desconocemos los múltiples beneficios que estos tornillos y piezas de fijación nos ofrecen.
-Son anticorrosivos.- Gracias a su composición, resultan resistentes ante los ácidos.
-Resistencia al calor.- Los tornillos de acero inoxidable llegan a soportar temperaturas de hasta 300 grados centígrados.
-Son excelentes conductores eléctricos.
-Por su acabado de cromo, evitan la oxidación que deja manchas con el paso del tiempo donde se aplican.
-Gran duración en relación a otro tipo de materiales.
-No requieren mucho mantenimiento.
Además, son altamente resistentes al agua, al vapor, a la humedad y a una gran diversidad de ácidos, por lo que su uso es ideal tanto para interiores, como para exteriores, aguantando prácticamente cualquier tipo de clima y condiciones meteorológicas.
Gracias a sus bondades, los tornillos de acero inoxidable tienen gran demanda para la fijación y unión de piezas en prácticamente casi todas las industrias, por lo que, si requieres de tornillos de acero inoxidable de gran calidad y a excelente precio